miércoles, 20 de junio de 2007

Stranger than Fiction


Ya dije en otro post que soy cinéfila por aprendizaje... (mi mamá es cinéfila y mi papá también) así que siempre que hay alguna película que me llama la atención la veo sea buena o mala.
Había visto en diciembre los anuncios de esta película y sabía que era diferente. Cuando fuimos al cine escogimos "the good Shepherd" (la historia de los inicios de la CIA) en vez de ésta, pero tuvimos la oportunidad de verla después.

Está protagonizada por Emma Thomson , Will Ferrell, Dustin Hoffman y Queen Latifah. A pesar que Will Ferrel sólo había hecho (o es famoso por hacer) películas cómicas en ésta actúa distinto, yo diría que "en esta actúa".

Quizá me gustó la película porque me gusta leer y sé que existe ese dilema autor vrs. personaje, que ha sido descrito por muchos autores a lo largo de los años. Hay autores que dicen que los personajes de sus novelas se vuelven conocidos y casi familiares. Por ejemplo Ernesto Sabato en su libro Abadón el Exterminador se pone a sí mismo como parte de su libro, interactuando con sus antiguos protagonistas, García Márquez comentó en una entrevista el aprecio que le tenía a la familia Buendía. Me imagino cómo habrá sido para Cervantes Don Quijote.

Cuando un personaje está hecho con todo detalle, tomando en cuenta la personalidad, la apariencia física y el entorno en el que vive, es cuando nacen personajes completamente definidos. Dicen que es muy difícil escribir una buena obra sin inspirarse en algo real. No sé cómo sería conocer a los protagonistas de la novela, como le acaba de pasar al autor francés Pierre Jourde, quien está demandando a sus personajes por intento de asesinato (le intentaron linchar después de conocer que el libro que publicaba se "basaba" en el pueblo donde vivían).

Pero, volviendo a la película, yo la recomendaría para todo aquel que le gusta leer. Es diferente. Escribir siempre ha sido un arte y ahora que existe el cine se pueden mezclar ramas artísticas lo que lo hace aún más interesante.

viernes, 15 de junio de 2007

Donald Trump Steaks® !!!


En el Centro Comercial de BayBrook existe una tienda donde venden cosas extrañas, como una escalera para que el perro pueda subirse más cómodamente a los carros, o un equipo para escuchar conversaciones a distancia.... también están las clásicas bocinas con forma de perro o gato para ponerlas al i-pod, o un radio para escuchar en la ducha... y cosas así. Mucho de lo que venden está en la revista sky mall que dan en los aviones (la cual ya es decir mucho).

Caminábamos por la tienda cuando nos encontramos una pantalla grande con un video de Donald Trump. Mi primera impresión fue pensar que vendían toda las temporadas de "el Aprendiz" y pensé que decía: "you're fired!", pero nooo, qué va... eso hubiera sido normal. Creo que la primer carcajada llegó cuando vimos que ofrecía carne. Si señores... Donald Trump está con tacuche y corbata vendiendo carne cruda de "primera calidad". Yo ya creía haber visto de todo, en verdad creí que no podían ir más hacia lo ridículo. Nunca digas nunca, dicen por ahí...


En el folleto que promociona (que tuvimos que traerlo como un souvenir) están todos los tipos de carnes: portehouse steak, filet mignon, cowboy bone in ribe eye steak, boneless new york strip, y por supuesto la nueva Trump Steak Burger (que se incluye como marca registrada). Por si no fuera poco hay varias instrucciones y recetas de cómo cocinar el asado perfecto!! El cómico folleto (realmente da risa) tiene una pirámide (aprobada por la USDA) donde indica que la carne "Trump" está entre el 2% de las carnes exclusivas y "de primera calidad" y garantiza tener la mezcla perfecta entre grasa y carne (precisamente lo que más me gusta de las carnes: la grasa), cortadas por un carnicero maestro (de la carnicería "Trump" posiblemente) y aseguran llevar la carne congelada y sellada en una distintiva caja dorado con negro (porque, claro, qué es la carne sin la caja!).

El paquete "clásico" que ofrece empieza en la módica suma de $199 ¡¡Sii la oferta del milenio!!! Incluye dos filet mignon, 2 cowboy bone-in-rib-eye y 12 "Trump Burgers® " ... el paquete "Connoissieur" cuesta $999 (será realmente vacas de donde saca la carne?, quizá sea la vaca "Trump"). Por un momento me acordé de la película Spaceballs, donde ofrecen todo tipo de productos con la imagen de la película, a Donald Trump sólo le hace falta vender su propio cereal, porque ya tiene el muñeco de plástico.

Por supuesto que nosotros "esperamos el día con ansias" cuando compremos la carne Trump Ohh sí, esa mezcla de grasa con carne hmmhmm sacada de vacas del espacio (o quizá tenga diminutos diamantes adentro! Si! eso es!!!) estará pronto en nuestra parrilla especial, eso sí, es probable que tengamos que comprar la parrilla Trump para asarla.

martes, 12 de junio de 2007

tierno, jugoso y crujiente


En mi afán de encontrar sabores familiares en Houston, buscamos el Pollo Campero el fin de semana. Hay varios restaurantes aquí y el más cerca nos queda aproximadamente a 40 minutos de donde vivimos. Nos preparamos de antemano con google maps para no perdernos (porque es muy fácil perderse) y decidimos almorzar allí.

En el camino iba imaginándome el menú "tradicional campero" que he probado en Guatemala desde que puedo masticar. Pensé en comprar "camperitos" para llevar y en pedir también ensalada de repollo. Podía sentir el olor al pollo desde que imaginé estar allí sentada.

Al llegar nos atendió un señor sonriente y amable, vimos los menús al frente y en las fotos estaba el pollo acompañado con arroz (en vez de papas). No había menú "tradicional" pero pedimos el de dos piezas, uno acompañado con papas fritas y el otro con arroz y pan (en vez de tortillas que era también otra opción).

Me sorprendió que nos ofrecieran de tomar horchata, tamarindo o aguas gaseosas. Por supuesto pedí un tamarindo, el cual me supo delicioso, al igual que el pollo. El sabor no es exactamente el mismo, eso sí. Era de esperarse, supongo, pero igual me gustó. Pedí para llevar una orden de plátanos fritos (que los acompañan con crema) porque me imaginé desayunándolos al día siguiente en un "clásico desayuno chapín" y por eso se me olvidó pedir camperitos, que todavía no estoy segura si los venden.

El restaurante está decorado exactamente como todos los restaurantes guatemaltecos (supongo que es parte de la imagen Campero). Una de las paredes está pintadas de temas guatemaltecos y otras con las banderas de Centroamérica y México, junto con una pequeña historia visual de los distintas imágenes que ha tenido el "pollo" desde 1971.

En general me pareció un buen servicio. Lo que no me gustó fue la música, pues tenían canciones en español tipo cumbia y texmex. Habíamos 3 grupos de personas comiendo y al fondo, el partido entre Guatemala y el Salvador.

La sensación fue familiar, me sentí en Guate por un momento. Me alegra que se han ampliado hacia estos sectores y así nosotros que estamos lejos también podemos probar por unos instantes un sabor completamente familiar. Seguro volveremos, esta vez espero comprar mis camperitos.

miércoles, 6 de junio de 2007

Republic of Texas Biker Rally


El fin de semana pasado fuimos a Austin, al rally de motocicletas más grande de Texas (Republic of Texas Biker Rally). Se juntaron alrededor de 120,000 motos, la mayoría Harley Davidson. Los aficionados, viajan de todas partes de Estados Unidos para este evento. Es como la peregrinación a la Meca de los motoristas.

La ciudad de Austin se convirtió en un carnaval dedicado a las motos. Shows en vivo, cantantes en cada cuadra y gente manejando motos en las calles. En mi vida había visto tantas Harley Davidson juntas. Sólo estacionadas en las calles quizá habían 5,000. Caminamos por una cuadra en donde habían una después de otra, después de otra.. como exhibición permanente. Ni en un museo creo que se juntaría tanta variedad. Vimos desde las clásicas de 1940, hasta las estilizadas hechas a la medida. Habían de todos colores y estilos. Unas muy brillantes, otras negras, otras semi-diabólicas, otras rosadas, otras con motor de 8 cilindros.....

A veces estaba sentado el dueño de la moto, con el que se podía conversar sobre dónde la adquirió, cuánto le costó, cómo la reparó... etc..etc..Era un intercambio de términos motorísticos y mecánicos que iba y venía. Como hablar otro idioma.

El estilo de los motoristas sigue siendo inconfundible. Jeans de todos estilos, botas de punta redonda, algún accesorio en la cabeza (pañuelo, gorro, lentes), una playera de la Harley Davidson y/o mucho más. Estilos hay tantos como los hay personas, al igual que motocicletas. Vimos desde la chica semi desnuda con accesorios de cuero, hasta los señores de 70 años con barba trenzada y tatuajes. En general es una mezcla de personajes y personalidades. Se distinguía perfectamente quiénes eran motoristas y quiénes íbamos de visita. Lo que sí es cierto es que la comunidad de motoristas no es tan terrible como la pintan. Se visten de forma rebelde, porque es el estilo, pero son muy buenas personas. No es un grupo cerrado, más bien es un grupo abierto y sociable (o por lo menos lo que pude conocer y observar)

Como tenemos unos amigos que tienen una Harley Davidson, no podía resistir a la invitación de subirme a una. Tomando todas las precauciones del caso, y sabiendo que el piloto es bastante cuidadoso, me subí. Qué sensación!!! Al principio era una mezcla de rezo "Dios mío no me dejes morir en moto!" Luego se fue convirtiendo en adrenalina, pasé del miedo a la emoción, a sentir que iba volando en el camino, sentí esa sensación de libertad, como si la moto fuera un pájaro que me llevara por la carretera... Me imaginé viajando por calles solitarias sintiendo y escuchando el viento, de fondo, paisajes verdes y cielos azules. Me transporté a otra parte. Volví a Austin en un cerrar de ojos. El paseo había terminado y yo sonreia feliz.

Más tarde, estuvimos a un pub Irlandés lleno de motoristas tejanos (raro el contraste) y presenciamos un concierto de U2 (o por lo menos lo más cerca que he estado a uno). Un grupo de Austin tocaba sólo canciones de U2, imitándoles en estilo, voz y hasta en apariencia. Fue bueno. Tocaron muchísimas canciones que ni Bono toca ya en sus conciertos. El cantante se le parecía bastante lo cual lo hacía mejor todavía. Hay de todo en esta ciudad, definitivamente.

El fin de semana finalizó con desperfectos mecánicos, (la moto de nuestros amigos se descompuso) pero a la larga nos la pasamos bien. Volvimos pensando en el siguiente rally que va a ser en Galveston (a una hora de Houston)... quizá nos estamos volviendo aficionados también...