Insomnio

Quiero dormir y sigo pensando, y pasan las horas..... y el sueño no llega. El insomnio me visita de nuevo. Es algo que he padecido desde siempre. Puede ser que me acueste con muchos pensamientos en mi cabeza, o que me despierte después de cuatro horas de sueño con el descanso suficiente. Esta vez fue una taza de café expresso que me tomé después de las 10 de la noche.
En este momento recuerdo a mi mamá diciéndome: No tomés café después de las 8pm porque después no lográs dormir...
Tenía razón. Siempre tiene razón.
Pero, de alguna manera el insomnio me gusta. Es reconfortante despertar cuando todos duermen, escuchar este silencio casi absoluto alrededor. Los pensamientos se amplifican y se multiplican. Mi cerebro se activa y me dan ganas de escribir, de crear, de inventar.
Pienso en personajes para una novela, en influencias literarias, en libros antiguos, en películas extrañas, en nuevas tecnologías para mejorar algunos alimentos, en sistemas eficientes para conservar el agua.... y más, mucho más...
Todo esto en cuestión de minutos.
Es increíble. La última vez, recuerdo haberme quedado acostada pensando por tres horas, quizá y durmiendo por fragmentos. Hoy decidí mejor escribir un poco.
A veces solía tener una libreta al lado de la cama, para escribir lo que me venía a la mente y liberar un poco de "epacio". Ahora esta es mi libreta.
Dentro de poco va a amanecer y los primeros autos van a empezar a recorrer. En Guatemala solían despertarme los pájaros a las 5 de la mañana, aquí me despiertan algunos vecinos que madrugan para salir a sus destinos temprano.
Voy a salir afuera para ver el amanecer y empezar un nuevo día.
Por la noche prometo no tomar café...