jueves, 4 de octubre de 2007

Quauhtlemallan


Guatemala viene del náhuatl que significa "tierra de árboles", sin embargo día a día vemos cómo se está destruyendo nuestro origen. En Guatemala cada vez queda menos bosque.

Leyendo un poco sobre calentamiento global y emisiones de CO2 me enteré que el 30% de la contribución al calentamiento global viene por la deforestación masiva a nivel mundial. En países como Australia, Brasil han arrasado con los bosques para dar lugar a urbanización y cultivos. En Guatemala sucede lo mismo.

A pesar que nuestro suelo es excelente para los árboles, la población sigue afanada en la agricultura, sembrando el maíz y el frijol de todos los días. No es que me oponga a esto, sino simplemente que me gustaría ver a la gente pensando más a largo plazo.

Las tendencias siguen siendo alarmantes, nos reproducimos cada vez más rápido y de la misma forma estamos derrochando los recursos como si fueran infinitos. Se necesitan espacios para vivir y tierra para sembrar. Si para esto se cortan "unos cuantos" árboles pues no es nada. Lo terrible es que los efectos se están viendo ahora. La época seca en Guatemala es cada vez más seca y la lluviosa cada vez más lluviosa. Los terrenos siguen erosionándose pues no tienen árboles o vegetación alrededor que detenga la erosión naturalmente.

Sin embargo creo que esto puede cambiar en poco tiempo. El mercado de los árboles está empezando a producirse. En lugares como Australia, Inglaterra y Noruega se están haciendo grandes negocios con "bonos forestales". Llegó el día en que los árboles empezaron a adquirir más valor del que realmente se les daba. Es una tendencia que está ganando tal fuerza que quieren incluir en el Protocolo de Kyoto una sección especial para que los países inviertan en sembrar árboles. Hasta ahora se están dando cuenta de lo necesarios que son, de lo que hacen por los ecosistemas. Una clase de ciencias naturales de tercero primaria: lo maravilloso de la fotosíntesis. Todos lo sabían, pero hasta ahora empezaron a ponerle valor monetario.

En 1988 la empresa AES Corporation, una compañía generadora de energía a nivel mundial estaba construyendo una planta en Coneticut de 180MW, su predicción era emitir al ambiente 15 millones de toneladas de carbón en un año. Por eso decidieron "voluntariamente" contribuir con $2,000,000 a la reforestación y escogieron Guatemala para realizar su propósito. No sé cómo estarán ahora estos bosques, pero estoy segura que dentro de poco Guatemala será un país con mucho potencial para "negociar sus bosques".

Nunca he endendido por qué Guatemala no tiene una industria forestal, que se dedique a cuidar de sus bosques y a explotarlos adecuadamente. En cualquier parte crecen los árboles y se tardan 5 años para crecer. Creo que el mercado de la reforestación para contrarrestar las emisiones de CO2 va a empezar a abrirse en Guatemala porque es un país con mucho potencial.

2 comentarios:

Manzanita dijo...

lamento decirte esto pero el significado real de Quauhtlemallan es "Ágila Cautiva" sólo que las personas prefieren verlo como "tierra de árboles" porque obviamente a nadie le gusta la traducción original...

BC dijo...

Por supuesto hay diversas versiones del origen de la palabra. A mí me parece extraño que tanto en Nahualt como en K'iché tenga un significado muy similar.
Sin embargo, según tengo entendido la definición varía desde el rey cakchiquel "Juitemal" (Francisco Fuentes y Guzmán), o
"cerro de Guatemala" (Paula García Peláez) o "entre montones de madera" (Walter Krickeberg).
En las primeras cartas escritas por Pedro de Alvarado a Hernán Cortés en 1524, se escribe el nombre Quauhtemallan, refiriéndose a nuestro país. Yo me baso en la definición de Adrián Recinos quien afirma que la etimología es Náhuatl y la escribe como: Quauhtemallan "tierra de árboles". Pero según sé, no hay un acuerdo entre los antropólogos e historiadores. Puede ser que Manuel García Elgueta tenga razón y sea águila cautiva, pero tampoco la llamaría como una "traducción absoluta".